#254. ¿Os habéis parado a pensar nunca como sería vuestro día perfecto? es algo que me viene a la mente de vez en cuando para ver si lo que estoy haciendo diariamente sigue en línea con esta idea.
Tabla de contenidos
Mi día perfecto
En mi día perfecto me levanto entre las 7 y las 8. Ella dice algo en su idioma nativo. Lo entiendo porque incluí su lengua materna en mi lista. Lanza una broma y finge estar enfadada. Acto seguido se pregunta a si misma cómo puede estar con un hombre que se levanta tan pronto. “Con este cuerpo podría estar con cualquiera que le gustase dormir más” dice en inglés. Contesto con sarcasmo en catalán. Lo entiende pero no dice nada porque se vuelve a dormir.
Me siento en la silla de meditación. Cierro mi mente durante unos minutos antes de que el perro de tres patas venga a por su ración mañanera de caricias. Me levanto, hago un poco de café aprovechando para estirar el cuerpo mientras espero. Cojo el portátil y me dirijo al despachito.
Tengo mi propio negocio online desde hace unos años y me encanta. Mi sueldo es de más de 3.000€ mensuales pero nadie que no me conozca lo pensaría. Vivo frugal y simple. Poseo sólo algunas prendas de ropa de calidad, y actúo según mis valores.
Mientras escribo u grabo lo planificado para el día, disfruto del trabajo acompañado de cafeína al ritmo de música Chill sin voz. Cuando llevo unos 50 minutos sentado no puedo evitar levantarme para dar algún bailoteo. Afortunadamente nadie me ve porque no tengo vecinos.
Vivo en una casa de madera. Es un hogar acogedor con estructuras y trucos para aventajarme al máximo del espacio. Es un poco Lego. Está cerca de la montaña y del océano, a los que puedo ir caminando o tomando la bicicleta.
Al cabo de unas 3 horas de trabajar y estudiar temas de interés, me intenta asustar por detrás. Caigo casi cada día. No me quejo porque camina con esos shorts que adoro, así que decido que es un buen momento para descansar la mente un rato.
Uno de nosotros cocina un plato vegetariano o vegano. Más densidad de proteínas y grasas que de carbohidratos. Gastamos más dinero en comida de calidad que la mayoría, pero no dudamos de que valga la pena.
Después de comer, me entra el sueñecito. No es por ningún pico insulínico, pero porque hacia esa hora es cuando estoy acostumbrado a echar una siesta. Me voy a la cama durante 20 minutos y me levanto con una cara que parece que haya dormido 6 horas. Son aproximadamente las dos. Repaso un poco más las lenguas o administro el negocio.
Hago un té rojo antes de trabajar las 2 últimas horas para posteriormente disfrutar de la tarde.
A partir de esta hora acostumbro a pasar el resto de mi día perfecto con variaciones. Siendo social con amigos y conocidos, planificando nuevos proyectos, tocando algún instrumento, bailando, aprendiendo idiomas, yendo a caminar, escribiendo, haciendo pesas, en bici, a la playa… Después de haber disfrutado de la rutina mañanera es por la tarde es cuando dejo espacio para la espontaneidad.
Vuelvo a casa alrededor de las ocho. Estoy con ella de nuevo. Bromeamos y hablamos de nuestro día mientras cocinamos. Comemos mientras miramos una de nuestras series favoritas. Me relajo un poco escribiendo cuatro tonterías o navegando por la red con un té en mano en una de las esquinas del sofá. Ella se ríe desde el otro lado mientras mira su móvil. “Shhht!” digo tomándole el pelo. De forma suave pero con decisión me abofetea la pierna.
Al cabo de dos minutos de tranquilidad me intenta enseñar un meme en el móvil. Decido que es una buena idea sacarme el calcetín e intentar ponérselo en la boca. “Stooop!” me dice mientras se intenta defender. Acabamos llegando a un estado más físico y termino encima de ella intentando de dominar sus extremidades. “I hate you!” grita, aunque ambos sabemos que en realidad siente lo contrario.
Mi día perfecto: en inglés
¿Por qué tengo el mismo relato en inglés? Después de tanto leer Kerouac y Bukowski supongo que quería ser como ellos. Aunque no lo conseguí, sí que me ayudó a mejorar mucho en esta lengua.
Escribir un día perfecto en inglés puede ayudar mucho para practicar los tiempos verbales pero también a pensar qué queremos para nuestro futuro.
On my perfect day I wake up between 6 and 7. She mumbles something in her native language. I understand because I studied her mother tongue as my forth or fifth language. She jokes or pretends to be pissed. Then she asks herself out loud why she is with a guy who wakes up that early. “With this bod I could be with anybody who likes to sleep in” says in English. I reply with a sarcastic witty joke in Catalan. She understands but says nothing because she is asleep again.
I head to the meditation chair. There I keep my mind shut for a few minutes till the three-legged dog comes for some cuddles. I stand up, make some coffee and I pour some milk I got from my own goat or the local market. I begin working on the laptop.
I have had my own online business for a few years now and I love it. My income is more than 3.000€/month but nobody who doesn’t know me wouldn’t guess. I live pretty simple, I have just a few but high quality clothes, and my ego is nearly non-existent. My self-esteem and confidence fuels me and I can stay quiet about it.
While I create the new content of the day, I enjoy my drink and play some music without vocals. I get a bit crazy sometimes with my dances. Thankfully nobody sees me since I have no neighbors.
I live in a wood house. The place is cosy and it has super cool structures and tricks to take advantage of the space. Kinda like lego. It’s near the mountain and the ocean. I can go to those places walking or taking the bike. It’s possible that the place might be “portable”. Perhaps a van.
After around 3–4 hours of online work, she tries to scare the crap out of me from behind. I bite every damn time. I don’t complain because she walks around with those shorts I love, so I decide it’s a good moment to take a little pause.
One of us cooks a vegetarian/vegan meal. High dense in fats and protein but low in carbs. We spend more money in quality foods than most people, but we think it’s totally worth it.
After eating, my “siesta” habit kicks in. I go to bed for 20 minutes and I wake up with a face looking like I slept 6 hours. It’s between 1–3pm. I do a bit of language learning. I make another coffee and I work my last 2 hours before enjoying a long afternoon.
Usually I spend the rest of the my perfect day with more variation. Socializing with friends, working on personal projects, playing drums, dancing, learning languages, going for a hike, writing, working out, visualizing, riding the bike, beach… Leaving some room for spontaneity.
I’m home around 9. I’m with her again. We joke and talk about our day while we cook together. We eat while watching a movie or TV show. After that I relax a bit with her and then I head to my desk. I write about personal stuff, fantasize about new projects or organize tomorrow’s afternoon activities. Then I head to the meditation chair. I rest my mind or visualize for a while. I head to bed exited to wake up tomorrow.
Qué es un día perfecto
Antes de escribir esto, pregunté a unos cuántos amigos cómo sería su día perfecto. Lo que me pareció interesante es que la mayoría tienen un poco de idea, pero nunca lo han pensado a fondo antes.
Cuando me puse a redactar mi día perfecto, tenía claro cómo NO quiero que sea. Pero me empecé a preguntar lo que realmente me importa.
Algunas veces cuando me levanto por la mañana y voy a correr, aprender idiomas o al gimnasio, intento visualizar cómo sería. Intento que esta bonita escena me aparezca en la cabeza una y otra vez. De hecho es bastante potente, y se hace más lo que quiero.
Por qué escribir un modelo de día perfecto
Gracias a tener mi día perfecto bien marcado, me ha ayudado a redactar mis objetivos de una forma más precisa. Describirlo, escribirlo y visualizarlo es un fantástico ejercicio para encontrar y cristalizar estos sueños.
Se trata de una visión. Con esto tengo mucho más claro si las cosas que hago hoy en día se acercan a como veo mi día perfecto.
De hecho hice este ejercicio hace más de un año y creo que es muy potente.
El vídeo es una genialidad y me parece increíble que no sea mucho más conocido. O tal vez sólo soy un romántico de la vida.
Esta es la pinta que tendrá mi pequeño. Aunque tal vez no le harán falta los calcetines o que sea ciego de los dos ojos.
Creo que es importante escribir cómo sería mi día perfecto. Más que nada porque una serie de objetivos se ponen en frente, haciendo que me esfuerce más para conseguirlo. Hace mucho más claras las acciones y los planes para llegar al final de cada pequeño ciclo.
Algunas veces hay que estar incómodo, salir de la zona de confort para hacer los cambios necesarios. Pero esto es algo que viene de la mano con abundancia y prosperidad.
¿Cómo de genial sería vivir mi día perfecto cada semana? Creo que es totalmente posible si realmente uno es verdadero con él mismo.
Antes tenía una lista de sueños por cumplir demasiado grande, y terminé reduciéndolo en un puñado mucho más esenciales. Creo que escribir sobre esta rutina hace que quede mucho más claros que el ego domina lo que uno hace.
Cómo escribir un día perfecto
Se trata simplemente de pensar en qué pinta tiene mi día perfecto. Se tiene que escribir con el máximo detalle posible, para hacerlo lo más vívido que se pueda. Siendo específico y claro.
No hay que dejar que nada me tire hacia atrás para visualizar cada segundo desde que me levanto hasta que me voy a dormir.
Lo que me pregunto cuando escribo algo similar a esto es, en el caso de tener toda la libertad (tiempo y dinero) del mundo, qué querría.
Me ha sorprendido más de una vez encontrarme que no quiero cosas que cuando era un adolescente me pensaba que quería.
No quiero cambiar el mundo o la historia, ni siquiera ser recordado por desconocidos, sólo por un puñado. Por esto salió la idea no sólo de escribir mi día perfecto, pero también de estos textos que ahora, alguien que no soy yo están leyendo.
El ejercicio del día perfecto
Imagina un día perfecto. Quizá lo pases en el parque, tal vez prefieras una playa tropical, con un cóctel. Tal vez tengas una perspectiva diferente, y para ti sea un día súper productivo en la oficina, y luego volver a casa a cenar con tu familia.
Cuando se trata de días perfectos, no hay una talla única para todos. Son diferentes para cada persona. De hecho, incluso varían para nosotros individualmente. He tenido días perfectos en el trabajo, pero también he experimentado el tipo más clásico: un día de relax en una playa.
Sea cual sea el significado de un día perfecto para ti, conoces uno cuando lo vives. Pero, ¿con qué frecuencia ocurre esto? ¿Y podemos crear más de ellos a propósito?
Cómo crear tu día perfecto
Verás, la mayoría de la gente vive su vida en modo reacción. Las cosas suceden y simplemente tratan de lidiar con ellas. Pero con un poco de planificación, puedes guiar tu vida en la dirección que tanto deseas.
Entonces, ¿cómo podemos tener más de estos días perfectos? No sólo un día, sino muchos de estos días increíbles.
La respuesta es: debes crearlo tú mismo.
Este ejercicio está pensado para motivarte e impulsarte hacia el estilo de vida que quieres. Para ello, es esencial que desgloses tu día perfecto con gran detalle, así que sé específico.
Recuerda, aun así, que existen muchos tipos de días; al igual que hay un momento y un lugar para todo, un día perfecto no es el que haces TODO lo que te gusta, sino el que terminas satisfecho de tu vida.
Es decir, no intentes compactarlo todo en un día. En lugar de eso, puedes crear varios «días perfectos» para diferentes situaciones, como el día perfecto de viaje, el día perfecto con los amigos, el día perfecto productivo…
Consejos para crear un día perfecto
Pensar en nuestra vida ideal puede ser sorprendentemente difícil. Podemos tener vagos deseos de dar un giro a nuestra carrera, o mejorar nuestra salud, o fortalecer nuestras relaciones. Pero esos deseos siguen siendo deseos si carecemos de un enfoque claro. Imaginar exactamente lo que queremos nos ayuda a descubrir los pasos para conseguirlo.
Aquí tienes algunos consejos para hacer el ejercicio del Día Perfecto:
- Piensa en un futuro no muy lejano. Cinco años parece lo correcto, porque es lo suficientemente lejos como para que ocurra casi cualquier cosa, pero no tan lejos como para que ya no seas la misma persona.
- Empieza por el momento en que te despiertas. Imagina tu habitación (o el sitio donde quieras despertar por la mañana), cómo te sientes, qué te depara el día, cómo pasas la mañana, y parte de ahí.
- Asegúrate de escribir sobre las cosas que realmente quieres en tu vida.
- No te dejes llevar por los títulos. Es fácil escribir que te ascenderán o que encontrarás un trabajo «mejor», pero ¿qué significa eso? ¿Cuál es el trabajo real que estás haciendo en ese día perfecto?
- Debes saber que tu día perfecto puede cambiar con el tiempo. Todo evoluciona: tus habilidades, tu trabajo, tu vida personal, la tecnología, tú mismo. Por tanto, tu definición de un día perfecto también cambiará, así que puede ser bueno repetir este ejercicio en el futuro.
- Mantén esto sobre ti. Lo que resulta tentador en este ejercicio es empezar a escribir sobre el día perfecto de otras personas.
¿Y ahora qué?
Ahora que sabes cómo es un día perfecto para ti, piensa en tu vida actual y empieza a buscar las lagunas. Para ello, va bien hacerte algunas preguntas como las siguientes:
- ¿Cómo sería para ti vivir tu día perfecto?
- ¿Cómo lo estás viviendo ya?
- ¿Cuáles son las principales cosas que se interponen en tu camino para vivirlo mañana?
Si encuentras alguna laguna, significa que tienes deberes que hacer. Estas lagunas son indicadores de los objetivos que deberías tener.
Dicho de otro modo, deberías crear un objetivo por cada laguna que encuentres. Ese objetivo debería ayudarte a salvar esa laguna y acercarte a tu día perfecto.
Algunos objetivos serán a corto plazo, y algunos serán a largo plazo, pero poco a poco te ayudarán a acercarte a tu día (a día) perfecto.
Conclusión
No podrás cerrar todas las lagunas en un año. Algunas tardarán años o incluso décadas en cerrarse (eso son objetivos a largo plazo para ti). Y eso está bien. Esto no es una carrera. Pero si continúas con este ejercicio año tras año, puede que haya un momento en el que te des cuenta de que lo que has escrito se parece mucho al día que estás teniendo.
¿Te gusta el podcast?
Entonces te encantarán los episodios premium y la comunidad.
Sobre este podcaster ninja
