#244. El miedo al rechazo y el arrepentimiento de hacer algo donde potencialmente nos pueden rechazar es lo que nos hace estar más parados en la vida. Esta vez os propongo algo más que simplemente escucharme.
30 días de rechazos
Piensa en todas las oportunidades potenciales que has dejado pasar únicamente por miedo al resultado: aquella vez que temías que los compañeros se burlaran de ti en secreto si dabas tu opinión en clase, el hecho de no solicitar el trabajo de tus sueños porque suponías que te rechazarían, o la petrificación de incluso hablar con alguien atractivo por miedo a ser rechazado. Estos escenarios de pesadilla que dibujamos en nuestra cabeza… no son reales, sólo los utilizamos para evitar hacer las cosas que nos dan miedo.
Así que estamos afrontando el rechazo de frente y realizando un reto de 30 días para sentirnos más cómodos con él. Digo que lo estamos haciendo, pero me refiero a que lo estoy haciendo yo. Si decides unirte a mí, ¡házmelo saber a través de nuestro Discord!
Cómo participar
No es difícil, sólo tienes que intentar que te rechacen una vez al día durante los próximos 30 días.
Por supuesto, no debes intentar ir a por el rechazo obvio:
Tú: «¡dame un millón de dólares!»
Desconocido: «¡no!»
¿O quizás sí…?
En cualquier caso, lo que quiero decir es que deberías intentar apuntar a cosas por las que temes ser rechazado, no intentar que te rechacen activamente. En mi caso, la mayoría de las veces eso será conseguir el número de teléfono de una chica que me resulte atractiva, o algo similar.
¿Puedo participar si ya tengo una pareja?
¡Por supuesto! Seguro que hay muchas cosas que te gustaría hacer o pedir, pero no lo haces porque tienes miedo a que te rechacen.
Puede ser por miedo a ser juzgado, por falta de confianza, quizá por alguna meta personal para la que crees que no estás preparado, etc.
Inspírate con est0s 20 retos diarios
Puede que no tengas ningún objetivo en mente ahora mismo, pero que aún así quieras participar. No temas, estoy aquí para inspirarte.
Aquí tienes 20 ideas para intentar ser rechazado una vez al día. Puedes pensar en las 10 restantes tú mismo, o repetir algunas:
- Pide un cumplido a un desconocido
- Pide una visita a la parte trasera de una tienda
- Pídele un abrazo a un desconocido (no seas baboso)
- Pide una cita a una chica que te interesa
- Pide prestados 100$ a un desconocido (¡eso es, lo he añadido!)
- Ofrece una crítica constructiva a un amigo
- Pide un descuento en una tienda
- Pide el número a un desconocido
- Pide consejo a un conocido
- Preséntate a varios desconocidos
- Baila en público y pide a alguien que te acompañe
- Sube el precio de un artículo, dos veces
- Invita a comer a un desconocido
- Pide cambiarte/comprarle la ropa con/a alguien (no seas raro)
- Pide una comida o un café gratis en un restaurante
- Invita a un desconocido a cenar
- Pide a un desconocido que pruebe su comida
- Pide que te preparen la comida comprada en un restaurante
- Pide hacer una foto a un desconocido
- Pide a un conocido (con el que nunca has quedado) de ir a tomar un café
Recuerda…
Aquí tienes algunas cosas que debes recordar cuando el miedo al rechazo te invada:
Evitar las cosas las empeora, no al revés
Verás que, al abstenerte de realizar la acción, te estás causando irónicamente más estrés. Sí, no estás realizando la acción dolorosa, pero al mismo tiempo, estás aumentando los indeseables y molestos pensamientos sobre tu incomodidad en tu cabeza.
Al no hacer las cosas que te dan miedo, estás creando un estrés innecesario en tu vida, y al hacerlo, no actúas ni creces.
La oportunidad perfecta no existe
Todo el día estarás buscando a la persona perfecta, al individuo más accesible que puedas imaginar. Pero recuerda, la oportunidad perfecta (o la persona perfecta y más accesible) no existe, nunca existirá, así que deja de buscarla o nunca actuarás.
La inercia lo es todo
Sabiendo que la evasión sólo empeoraría las cosas, ve a por ello sin pensar: cuando te des cuenta, será demasiado tarde para retroceder.
La primera palabra es la más difícil
Una vez que hablas, una vez que dices «perdón», la gente está dispuesta a escuchar. A partir de ahí, las cosas sólo son más fáciles. Saber que las primeras palabras de cualquier conversación son las más difíciles contribuye en gran medida a poner en marcha las interacciones.
El rechazo no es lo que crees
Es tremendamente importante entender que los sentimientos de decepción asociados al rechazo son completamente normales, y que no debemos tener miedo de sentirlos en el futuro.
Además, después de ser rechazado tres o cuatro veces, te sentirás bien después, orgulloso incluso de haber salido de tu zona de confort y de haber realizado los retos.
La adrenalina te dejará con ganas de más
Curiosamente, aunque tengas tanto miedo de abrir la boca antes de cada reto, durante unos breves 15 minutos después de realizar cada uno, el subidón te dejará con ganas de más, queriendo observar cómo serían las interacciones al hacer la misma pregunta a otros, queriendo obtener un sí en lugar de un no…
Es importante reconocer estos sentimientos a medida que avanza nuestro reto. Quizás sea una buena idea realizar cada reto varias veces cuando (con suerte) aumente nuestra confianza.
Será más fácil con un amigo
Al igual que cuando vas al gimnasio, si lo haces con un amigo, os responsabilizaréis mutuamente.
No me refiero a acercarse a la gente de dos en dos y ser rechazados, eso restará valor a la experiencia. Me refiero a que os prometáis mutuamente que completaréis el reto diario, a que sintáis que estáis defraudando al otro si no lo hacéis, y a que compartáis vuestros pensamientos y experiencias.
Nunca está de más intentarlo
Si quieres algo, no está de más intentarlo.
Lo peor que puede pasar es que la otra persona diga «no» y te vayas con lo mismo que tenías antes.
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Sobre este podcaster ninja
En internet soy Pau Ninja y aunque tengo muchos blogs de mil temáticas que me parecen interesantes… Sólo tengo un podcast. Este. En la senda hacia el conocimiento cambié la katana por un micrófono para combatir la sed de curiosidad.
